EL PEZ DORADO
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J.M.G. LE CLÉZIO
EL PEZ DORADO
Traducción de Mercedes Corral
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Título original: Poisson d’or
1.ª edición: diciembre 1999
© Éditions Gallimard, 1997
© de la traducción: Mercedes Corral, 1999
Diseño de la colección: Guillemot-Navares
Reservados todos los derechos de esta edición para
Tusquets Editores, S.A. - Cesare Cantù, 8 - 08023 Barcelona
ISBN: 84-8310-118-1
Depósito legal: B. 44.298-1999
Fotocomposición: Foinsa - Passatge Gaiolà, 13-15 - 08013 Barcelona
Impreso sobre papel Offset-F Crudo de Papelera del Leizarán, S.A.
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Impreso en España
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Quem vel ximimati
in ti teucucuitla michin.
Oh, pez, pececillo dorado, ¡ten mucho
cuidado!
Son muchas las redes y trampas que te
tiende este mundo.
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Cuando tenía seis o siete años, me raptaron. En reali-
dad no me acuerdo muy bien de cómo fue, porque era
demasiado pequeña y todo lo que he vivido después ha
borrado ese recuerdo. Es más bien como un sueño, como
una pesadilla lejana, terrible, que se me repite algunas
noches y me deja alterada durante todo el día. Hay una
calle blanca por el resplandor del sol, polvorienta y va-
cía, el cielo azul, el grito desgarrador de un pájaro negro
y, de pronto, unas manos de hombre me arrojan al fondo
de un gran saco y me ahogo. Lalla Asma fue quien me
compró.
Por eso no sé cuál es mi verdadero nombre, el que mi
madre me puso al nacer, tampoco el de mi padre ni el del
lugar donde nací. Lo único que sé es lo que me contó La-
lla Asma: que llegué a su casa una noche y que por eso
me llamó Laila, la Noche. Soy del sur, de muy lejos, tal
vez de un pueblo que ya no exista. Antes de eso no re-
cuerdo nada, sólo esa calle polvorienta, el pájaro negro y
el saco.
Después me quedé sorda de un oído. Fue mientras ju-
gaba en la calle, delante de casa: una camioneta me dio
un golpe y me rompió un hueso del oído izquierdo.
M